Científicamente se ha determinado que las causas que pueden generar pérdida del pelo son muchas, por lo tanto los pacientes que sufran de este problema deben tener cuidados en las diferentes áreas que nombramos a continuación.
Es muy común que la alopecia tenga origen en factores genéticos y cuando es así, el proceso es irreversible pues la información que tienen nuestros genes no se puede modificar.
La mala alimentación es otro factor perjudicial que acelera la caída del pelo, pues cuando el cuerpo no tiene suficientes vitaminas y grasas el paciente se vuelve más vulnerable a padecer problemas como anemia que afectan el crecimiento del pelo.
Los problemas hormonales como un nivel muy elevado de testosterona, o complicaciones en el funcionamiento de los ovarios, la tiroides, la hipófisis y las glándulas suprarrenales pueden también generar caída del pelo.
El uso de productos estéticos o médicos con altas concentraciones químicas también pueden afectar el desarrollo del pelo. El ejemplo más común son las personas que se someten a la quimioterapia o que se realizan tratamientos para alisar el pelo con químicos.
Por último, el estrés también es un factor que afecta a los pacientes pues junto con la falta de sueño y la depresión el cuerpo sufre cambios químicos que se pueden ver reflejados en la caída del pelo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario